Pude ser completamente feliz este fin de semana que pasó, mi familia y yo nos embarcamos en una aventura que jamás olvidaré, volamos y recorrimos geografías desconocidas, me sentí más cerca de Dios, más extasiado que nunca, y comprendí que somos una hormiga en el universo de la creación, desde allí arriba todo es perfecto y desde ese lugar me doy cuenta de lo importante de haber tenido una cámara para obturar un paisaje como este, y poder tener vivo el maravilloso mundo de nubes y de sensaciones que creo que ni la más fuerte droga podría ni siquiera asemejarse a este pedacito de eternidad en el cielo literal...
G.M.V
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